Mientras los trabajadores de la alcaldía de Machiques protestaban cerrando la troncal 006, Vía a Perijá, en Caracas a los alcaldes de Oposición no se les permitió el paso a la sede de la Vicepresidencia ejecutiva de Venezuela.
Hoy conversé con el alcalde de Machiques, Alfonso “Toto” Márquez, no es la primera vez que hablamos y aunque debo confesar que con él siempre el trato ha sido muy cordial y en un tono muy personal, esta vez me dejó una inquietud que me ha puesto a escribir de forma diferente.
Algo que seguramente se convertiría en una nota de prensa, no salió así porque sentí que el Toto, como lo llaman sus amigos y familiares más cercanos, me habló desde el corazón.
Ya lo dijo Exupéri en su obra El Principito, “lo esencial es invisible para los ojos” y el tono de preocupación real por no poder cumplir compromisos esenciales para sus trabajadores, como la bonificación de fin de año, preocupa no sólo al alcalde de Machiques sino al resto de alcaldes y gobernadores de “oposición” que fueron escogidos democráticamente y con el voto mayoritario de sus respectivos electores.
Los trabajadores de la alcaldía protestaron hoy desde las 8:00 de la mañana hasta las 5:00 de la tarde a la entrada de Machiques, el cierre de la Troncal 006 no movió a ningún vocero gubernamental a dar respuesta a la exigencia de los funcionarios, “¿dónde está la plata que debió llegar al municipio y no enviaron?” preguntaron.
Esta inquietud la comparten otros mandatarios que al igual que en Machiques, tampoco recibieron recursos para honrar los compromisos de fin de año.
“Hoy fue una comisión de alcaldes del área metropolitana y otros municipios, entre ellos el alcalde de Barquisimeto, Alfredo Ramos y Patricia de Ceballos alcaldesa de San Cristóbal, a la Vicepresidencia de la República y no los dejaron entrar”, confesó Márquez con indignación.
Lo que es ya costumbre cuando de “opositores” se trata, “encontraron un piquete de la guardia nacional, que les dijo que no tenían permiso para ingresar al edificio”.
El asunto de los pagos pendientes es sencillo, el gobierno nacional otorgó créditos adicionales a todas las gobernaciones y alcaldías a través de la vía ordinaria según consta en la Gaceta Oficial, pero después destinó un excedente equivalente a cuatro veces más del monto anterior, sólo para gobernaciones y alcaldías oficialistas, esta asignación la hizo a través del Fondem un organismo administrado discrecionalmente por la Presidencia de la República.
Por ejemplo a la alcaldía de Rosario de Perijá le ingresó por crédito adicional Bs. 31 millones y por asignación del Fondem Bs. 126 millones, ¡saque usted sus cuentas!
Esto deja al descubierto el manejo sectario, preferente y caprichoso de los dineros públicos, por un gobierno que se ensaña contra funcionarios electos democráticamente y dignos representantes de ese pueblo que dice defender.
Mi mente vuela y comienza a disparar interrogantes: ¿Cómo dialogar con esa clase de gente?, cómo pensar siquiera en alcanzar algún acuerdo coherente con quien se niega a recibir en su despacho a la autoridad de un municipio del país, cómo reconocer a quien no reconoce al otro.
Prosigo la entrevista y le digo al Toto “¿y tú qué piensas hacer? ¿Tienes previstos ingresos propios o adicionales antes de que finalice el año?”, me responde “los ingresos propios, están comprometidos con los gastos operativos del municipio, pero esta tarde hablé con un alcalde del oficialismo, que es “mi amigo” y me dijo que están por ingresar dos créditos adicionales más, antes de finalizar el año”.
Y continúa, “Estos si deben llegar porque vienen por la vía ordinaria y deben ser de unos 60 millones cada uno, lo que le corresponde a Machiques, con eso podré pagar los salarios y cesta tiques de noviembre y diciembre, pero no pagaré las bonificaciones de fin de año que suman unos 176 millones más”.
Así vamos en este país, mientras usted seguramente hacía la cola del banco, para tratar de salvar los billeticos que estaba guardando, para no quedar “pelado” en el fin de año y el inicio del 2017.
Richard Quintero Morán