La actitud de las etnias de mantener sometida a toda una población sin este servicio ha generado manifestaciones de rechazo.
Los caciques yukpas del sector Panayo, Sierra de Perijá, donde se encuentra el embalse de agua del acueducto de la parroquia Libertad, decidieron cerrar las llaves, este miércoles, por segunda vez en poco más de 15 días, dejando sin el vital líquido a toda la población de Machiques.
Los indígenas alegaron que están en completo abandono por parte de los gobiernos nacional, local y regional. “No cumplieron con la promesa que hicieron para nuestros niños" alegó el cacique mayor, quien manifestó que se habían comprometido con la entrega de 170 juguetes y bolsas de los Clap. Nada ha llegado hasta las comunidades.
Sentenciaron que hasta que no vaya al lugar algún representante de los organismos competentes, no cederán a sus peticiones. “Tienen que traer lo prometido, sino pasarán las navidades sin agua”, dijeron.
La actitud de las etnias de mantener sometida a toda una ciudad entera sin este servicio ha generado diversas manifestaciones de rechazo en el pueblo machiquense, que reclama contundencia de parte de las autoridades competentes para que eviten se siga repitiendo la misma actitud de siempre.
El pasado 4 de diciembre los indígenas tomaron el acueducto reclamando los alimentos y juguetes para los niños. Representantes de la Gobernación e Hidrolago, subieron al sitio para acordar las peticiones. Al no cumplir, este miércoles decidieron trancar de nuevo.